LA RESACA DESPUÉS DEL REFERÉNDUM




Ha pasado poco más de una semana del referéndum y terminados ya los comentarios apasionados pre y pos domingo 9 de diciembre, considero que este nos ha dejado algunos mensajes claros e importantes.

El primero y el más importante: La absoluta desligitimización del Congreso. Más de 3/4 partes de la ciudadanía ha votado en contra de la reelección de congresistas.

Ojalá le quede claro a nuestros congresistas que la población está harta de ellos y, valgan verdades, los anteriores congresos son tan responsables o irresponsables como este. Simplemente, la semillita del hartazgo fue germinada y regada por todos ellos y el presidente Vizcarra hábilmente supo sacar provecho de esta situación.

Gran parte de la culpa sin duda la tiene el fujimorismo, a través de su partido Fuerza Popular, que desde julio de 2016 y con su inmensa mayoría, dijo que gobernaría a través del Poder Legislativo y se dedicó, con mucho ahínco y esmero, a obstruir y destruir. Lamentablemente la bancada de este partido está infestada de gente muy cuestionada, de delincuentes, de los que defienden intereses particulares, de agresores de mujeres y otros. Hasta que se destruyó en medio de sus errores.

También son culpables el APRA y Acción Popular quienes, teniendo a los congresistas más experimentados como Víctor Andrés García Belaunde, Yhonny Lescano, Mauricio Mulder, Javier Velásquez o Jorge del Castillo, no solo no dieron el ejemplo, no solo no marcaron la pauta, sino que tampoco impulsaron ninguna reforma o ley importante. Más bien promovieron leyes que finalmente fueron declaradas inconstitucionales.

Lamentable porque habiendo algunos buenos congresistas que tenían ganado el derecho a ser reelegidos y a seguir haciendo una carrera política, tendrán que esperar un período. Justos pagaron por pecadores.

La ansiada bicameralidad también fue negada por el mismo rechazo hacia el Poder Legislativo y por la cochina trampa que hicieron al introducir en el proyecto el tema de la confianza, que desvirtuó la iniciativa enviada por el gobierno.

Fue increíble ver en los días que siguieron a toda esta casta de impresentables dando declaraciones como si nada hubiera pasado, ignorantes del voto de rechazo que han tenido, por sus propios méritos. Muy especialmente el vocero del fujimorismo, el señor Carlos Tubino, que cada día da más pena. Harían bien, pues, en quedarse callados por un tiempo y dedicarse, de una buena vez, a trabajar, según el encargo que les dimos todos los peruanos. Los medios de prensa también harían bien en olvidarse del ráting y dejar de invitar o entrevistar a los mismos payasos de siempre. ¡Que sientan el castigo!

Y fue peor aún porque, mientras los congresistas se preparaban para su semana de hueveo representación, previa a sus vacaciones pagadas de dos meses, como no tenemos el resto de peruanos, el gobierno nuevamente ganó la iniciativa para cerrar en el más breve plazo el tema de la nueva Junta Nacional de Justicia, forzando al presidente del Congreso a ampliar la legislatura hasta fines de enero o más, si fuera necesario.

En fin, no hay peor ciego que el que no quiere ver y la mayoría de nuestros congresistas, lamentablemente, viven en otro planeta. Lo lamento por los buenos.

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